En los últimos años la construcción, un sector económico muy potente, y que siempre se ha hecho de forma muy tradicional, ha tenido que cambiar. En buena medida por motivos económicos, pero también por unas exigencias mayores en sostenibilidad.

Gran parte del sector ha entendido que economía y sostenibilidad ambiental van de la mano. Ahora, estamos aprendiendo a construir al revés.

Ricardo Aristizabal es arquitecto.